Abuela Virginia

Virginia Masias creció en un orfanatorio en la Ciudad de México dirigido por monjas. Batalló con las estrictas reglas de las monjas y soñaba con ser adoptada por una familia cariñosa, pero nunca sucedió. Salió del orfanatorio a los 18 años con muy poca educación y consiguió un trabajo en una fábrica de empaque. Empacó papas durante varios años y fue subiendo de puesto hasta llegar a ser encargada de área.

Cuando tenía 20 años, se enfermó gravemente. Pasó varios días en el hospital con anemia nivel 3. Una noche, escuchó una voz que le decía que se levantara. Ella pensó que era una enfermera o un médico, pero no había nadie en su cuarto. Cuando escuchó la voz por tercera vez, supo que era el Señor. Ella respondió: “Señor, no tengo fuerzas”. Él respondió: “Yo te la daré”. Se levantó de la cama, cayó de rodillas y entregó su vida a Jesús. Tres días después, salió del hospital completamente sana e inmediatamente fue a la iglesia y se bautizó.

Venir a Jesús ayudó a Virginia a sanar de su pasado. Perdonó a su madre biológica, a las monjas, y siguió adelante con su vida. Se casó y se mudó a Tijuana. Estuvo casada durante casi 30 años antes de que su esposo falleciera. Nunca tuvieron hijos. Consiguió un trabajo en el aeropuerto de Tijuana como cocinera del personal. Trabajó allí hasta que la carga de trabajo fue demasiado para sus rodillas y su espalda.

Cuando ya no pudo cuidarse por sí misma, vino a la Casa del Abuelo. Virginia agradece la calidad de la atención que recibe de Angélica pero también compartió que Casa del Abuelo es un lugar de tranquilidad y que aquí ella tiene mucha paz. Esto es importante para ella porque cree que lo más importante que una persona puede hacer en su vida es encontrar la paz. Ella dijo: “Encuéntralo en tu corazón, con los demás, y aléjate de los confictosos”.

Apoya a los abuelos

La Casa del Abuelo atiende a más de 20 abuelos a la vez. Operan íntegramente con donaciones para cubrir los gastos operativos de agua, gas propano, gasolina, transportación, comida y medicina. Si gustarías apoyar a los abuelos por favor comuníquese directamente con la Directora Angelica Maria Vargas Ramirez por telefono 646.139.22.07 o enviar mensaje a vargasangelica@live.com.mx

         

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